Material perfecto para la cocción por contacto. Resistente a los golpes y a los choques térmicos, impermeable a olores y sabores, y no absorbe el gusto de los alimentos cocinados. Posibilita cocinar alimentos muy variados entre sí, uno tras otro, manteniendo intactos los sabores y aromas. Gracias a las propiedades antiadherentes del material, se reduce considerablemente la formación de humos durante la cocción. Fácil limpieza, eliminando así el riesgo de malos olores debidos a los restos de comida en las placas de cocción.